Cuarto 25.

Hay cosas que es mejor pensarlas. Cosas como si el universo es infinito o no. Cosas como si estamos tan controlados como pensamos…o más. Cosas como qué pasaría si un día dejas de estar a mi lado. Pero a pesar de ser cosas que no deben pasar por mi cabeza, lo hacen. Y ¿sabes? Creo que no se me ocurre nada. Nada. Eso sería yo si no estás. ¿Exagerada? Quizás. Pero no quiero ni puedo imaginarme una vida sin ti.

No veo una vida sin tus abrazos ni tus besos. Una vida sin cogerte de las manitas o que me acaricies mientras duermo. No me imagino qué sería de mis mañanas sin que me des los buenos días a besos o con palabras bonitas…

No quiero vivir sin ti y tu apoyo a cada instante. Sin las sonrisas que me contagias. Sin soñar despierta e imaginarme toda una vida contigo. Sin que me quieras y hagamos listas infinitas de todo lo que queremos hacer. ¿Te imaginas que ninguno de nuestros sueños juntos se cumple? Yo no.

Y por eso no voy a dejar que eso sea así. No voy a dejar que te separes de mi ni un segundo. Porque tu me has enseñado a amar y darlo todo. Porque desde que te vi no he conocido la decepción, ni la tristeza, ni el enfado. Sólo me he divertido con mis ganas de verte y estas mariposas en el estómago. Sólo he derramado lágrimas si eran de alegría o emoción. Sólo he tenido ganas de gritar para expresar todo esto que llevo dentro y que no había sentido nunca más. Porque me has enseñado a ser feliz, a quererme y a entregarme entera a ti.

Por todo eso, por tu carita y tus miradas de niño malo. Por eso mi única meta es hacerte feliz. Devolverte día a día todo lo que haces por mi.

Gracias por un 25 más.

Por todos los que nos quedan por delante…Por ti. Por nosotros. Gracias