24 de enero de 2012


No puede ser. Se me ecapó. Se fue con un suspiro apagndo  mi razón y ahora ya no creo en nada. La busco aquí, en la  habitación. Su ropa en el armario me recuerda aún su olor. Oigo su voz, aunque no está, sigo tratando de aceptar que me
falta el ruido...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por comentar :)